Las soluciones white-label permiten a las empresas ofrecer productos o servicios bajo su propia marca sin incurrir en los costos y tiempos de desarrollo desde cero, facilitando una rápida entrada al mercado y ampliando su oferta.
Por ejemplo, muchas instituciones financieras utilizan plataformas de pago white-label para ofrecer servicios personalizados a sus clientes sin desarrollar la tecnología internamente.
En Perú, el modelo white-label está ganando popularidad en sectores como tecnología y comercio electrónico, donde las empresas buscan diversificar sus servicios y mejorar la experiencia del cliente sin grandes inversiones en desarrollo.
Según un informe de Shopify, la metodología white-label se aplica en una gran diversidad de sectores, incluyendo alimentos y bebidas, cosmética, artículos para el hogar, sector financiero, turismo, tecnología y software.